Yuka app: tres razones para no usar esta aplicación móvil
Yuka es una app que clasifica a los alimentos en excelente, bueno, mediocre y malo. La idea de simplificar la vida al consumidor con colorines es muy buena… ¡todos queremos que nos faciliten la vida! El problema es que los alimentos «no son matemáticas» y la ejecución de la idea es muy complicada.
Tres razones para no usar Yuka
Todos los días alguien me pregunta qué pienso de Yuka (alegando incluso que está “enganchada” a la app). Personalmente no me convence porque no comparto algunos de los criterios que siguen para clasificar los alimentos. Las tres razones para no usar esta aplicación son exactamente los tres «criterios objetivos» de su método de evaluación.
1. El 60% de la calificación es la calidad nutricional medida por Nutriscore.
El Nutriscore, también conocido como semáforo nutricional, es una herramienta que aún necesita perfeccionarse. Ya hablamos sobre Nutriscore en detalle el año pasado en este post. El propio Ministerio de Sanidad reconoció en su momento que hay matices que tiene que afinar para adaptarlo a nuestro país (sobre todo en lo referente a las grasas).
Una vez que se realicen estos ajustes, Nutriscore no me parece un «mal invento! De hecho, me parecería mejor opción guiarnos solo por Nutriscore que guiarnos por YuKa. ¿Por qué? Porque en la app Yuka el 40% restande de la nota se calcula en base a otros dos parámetros discutibles: los aditivos y el carácter ecológico o no de sus ingredientes.
2. El 30% de la calificación son los aditivos.
Valorar si un alimento «es bueno o no» en función de sus aditivos es peligroso porque promueve la quimiofobia. Sí, en mi opinión y en la de otros muchos nutricionistas y expertos en la materia, Yuka es una app quimiofóbica. En esta imagen podéis ver que habla de riesgo medio o riesgo limitado en aditivos.
Los aditivos son seguros y esto nos tiene que quedar claro. Otra cosa es que muchos de ellos sean necesarios. Pero no podemos lanzar al consumidor la idea de que es un riesgo consumirlos. La Autoridad Europea de Seguridad alimentaria (EFSA) los considera seguros en las dosis permitidas. Sin embargo, además de la opinión de las autoridades, Yuka ha decidido emplear “estudios independientes». ¿Eso puede considerarse un criterio objetivo? ¿Acaso tienen más fiablidad esos estudios independientes que la opinión de la EFSA?
3. El 10% de la nota la representa que el producto sea orgánico.
Y creo que esto también es un grave error en la app Yuka porque no se pueden juntar churras con merinas. Un producto bio o eco no es más nutritivo por el mero hecho de serlo. Hay que diferenciar entre que un producto sea sostenible y que sea saludable. Puede ser más sostenible, pero no necesariamente más saludable. Hay galletas orgánicas que siguen siendo galletas.
Ejemplos que podemos encontrar en Yuka:
La aplicación Yuka otorga un “excelente” a pastas «de verdura» que en realidad están elaboradas a base de harinas refinadas. Sí, esas pastas con forma de lacito que llevan un 2,5% de tomate y un 5% de espinacas.
Por otro lado, muy sorprendentemente, pone al mismo nivel (incluso peor) unas sardinas en aceite de oliva que una Coca Cola Zero.
Conclusión sobre la aplicación Yuka
Estoy muy a favor de simplificar la vida al consumidor (me paso la vida en ello) pero no a costa de promover el miedo a los aditivos o a generar confusión con lo que son y no son los alimentos ecológicos. Creo que en Yuka deberían incorporar en su equipo nutricionistas y expertos basados en la evidencia. Hasta que sigan jugando con el alarmismo, desaconsejaré su uso. Y hasta aquí mi opinión, que por supuesto, solo es mi opinión