Cuando desde El Club de Malasmadres Laura Baena me pidió que le ayudara con la alimentación porque tenía dos objetivos: ponerse a punto tras el verano y preparar la carrera de la conciliación, lo primero que pensé fue NI HABLAR.
NI HABLAR, porque la confianza da asco y Laura no me va a hacer caso.
NI HABLAR, porque si no me hace caso no va a funcionar.
NI HABLAR, porque, además, si no funciona será culpa mía…
Y enrocada estaba yo en el NI HABLAR, cuando Laura intuyó que le iba a hacer la cobra cual Bisbal a Chenoa y me miró a los ojos fijamente:
- Marián, lo vas a hacer porque quiero que lo hagas tú y punto. ¡Ah! Y además quiero que lo hagas muy bien, porque vamos a publicar un post:
Que si quieres arroz, Catalina.
A Laura no solo le importaba un pepino mi negativa sino que quería mis pautas nutricionales por escrito y en formato post. Con sus negritas y sus cursivas. Así que aquí estamos. Si pinchan ustedes en la infografía de los mitos verán qué tres menús saludables le he preparado a Laura. Y muchas ideas más para poder continuar en esta línea… ¿se atreven ustedes a cambiar realmente las cosas en la vuelta al cole?
Imagen portada: PIXABAY