¿Para qué sirve el Ventolin?
El Ventolin es un broncodilatador que se emplea para tratar las crisis asmáticas (ojito ahora que estamos en tiempo de alergia) y el broncoespasmo producido por ejercicio (para prevenir el ataque agudo durante la práctica del deporte).
En definitiva, se utiliza en aquellas enfermedades del pulmón en las que hay inflamación de las vías respiratorias y se obstruye el flujo de aire en los pulmones.
Hasta aquí más o menos bien: Patty lo usaba correctamente ya que era una niña asmática.
¿Cómo funciona el Ventolín?
El Ventolin o salbutamol pertenece a un grupo de rimbombante nombre llamado agonistas beta-2 adrenérgicos de acción rápida. Esto quiere decir que es un fármaco que encaja con los receptores beta-2 adrenérgicos que están en el músculo liso del pulmón.
¿Qué pasa cuando llega el salbutamol al pulmón? Actúa relajando los músculos que rodean las paredes de los conductos de aire. De este modo, al aflojar y haber menos presión, los músculos dejan de oprimir tanto y se facilita que fluya el aire. Es como si el tubo de aire hubiera estado aplastado sin dejar pasar el oxígeno y consiguiésemos abrirlo un poquito.
¿El resultado final? Disminuye la sensación de presión en el pecho, la dificultad de respirar y la tos.
Conclusión: Mi amiga Patty sabía que respiraba mejor cuando usaba el Ventolin, pero no porque fuera un balón de oxígeno, sino porque el Ventolín dejaba vía libre a que el oxígeno pudiera circular por sus pulmones.
¿Por qué el Ventolin se utiliza a demanda?
Generalmente se aconseja utilizarlo «a demanda», es decir, únicamente cuando el paciente nota que lo necesita, ya que se ha observado que su uso continuado puede asociarse a un empeoramiento de la enfermedad. Es posible que se produzca un aumento de la hiperrespuesta bronquial a distintos estímulos como pueden ser los alergenos o el ejercicio físico. Lo que comúnmente se conoce como ser peor el remedio que la enfermedad.
Además, cuando un paciente explica al médico la cantidad de dosis que está necesitando tomar, éste puede valorar en qué estado se encuentra la enfermedad. Si las inhalaciones son frecuentes y no se consiguen controlar los síntomas, puede ser necesario introducir otro tipo de fármacos como los corticoides.
¿Por qué se utiliza de forma inhalada mayoritariamente?
Muy fácil: porque es la vía más rápida. De forma inhalada se consigue una acción más rápida minimizando los efectos secundarios. La broncodilatación tiene lugar de forma casi inmediata, alcanza su pico máximo en diez-quince minutos y dura entre dos y seis horas.
Efectos secundarios del Ventolin
Los efectos secundarios más frecuentes son las palpitaciones, taquicardia o teblores. Suelen durar unos treinta minutos y no son peligrosos. Por este motivo se dice, se comenta, se rumorea, que el Ventolín pone a los niños como una moto.
Salbutamol y doping
Pues sí, bajo ese cacharrito aparentemente inofensivo nos encontramos con una sustancia ergogénica (que en cristiano quiere decir que aumenta el rendimiento atlético).
Los agonistas beta 2 (como también lo son el salbutamol, terbutalina o salmeterol), mediante la broncodilatación permiten una mayor entrada de aire en los pulmones y mejor oxigenación tisular, motivo por el cual se consideran sustancias dopante. En algunos casos se permite el uso siempre y cuando se demuestre que el deportista sufre una enfermedad para la que está indicada el fármaco. Son frecuentes las polémicas por alcanzar niveles elevados de salbutamol en sangre en deportes como el ciclismo.
El consejo de la Boticaria
Los distintos dispositivos inhaladores (también conocidos como chuflos, flis-flis o flus-flús) son muy parecidos en cuanto al continente (cacharrito de plástico con boquilla y forma angular) pero no en cuanto al continente. En la farmacia observamos que son frecuentes las confusiones de Ventolin/salbutamol con Pulmicort/budesonida siendo este último un corticoide y por tanto especialmente grave la confusión.
A pesar de que mi colega farmacéutica Susitravel tiene varias ideas sobre reglas pnemotécnicas que pueden ayudar al paciente a diferenciarlos, yo no confío mucho en las asociaciones mentales que surjan nombres tan antipáticos como salbutamol y budesonida. Al igual que con el Ventolin pautado, puede ser peor el remedio que la enfermedad. Por ello, mi consejo es que aquellas personas que tengan varios dispositivos en casa de distintos medicamentos, marquen con un rotulador o una pegatina el de uso a demanda (Ventolin o salbutamol) para diferenciarlos del resto. En cualquier caso, invito a Susi a compartir sus trucos en los comentarios, porque no debemos acostarnos sin saber nada nuevo…
Fuentes:
Dopaje en el deporte. Portalfarma. Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos
Ficha técnica Ventolin 100 mcg/inhalación. AEMPS
Ficha técnica Budesonida Aldo-Union 200 mcg/pulsación. AEMPS