DESABASTECIMIENTO DE LA VACUNA TÉTANOS-DIFTERIA (Td)
De los creadores del taquillazo Bexsero está desabastecido y nadie sabe cómo ha sido y ¿dónde está la vacuna de la tos ferina, matarile-rile-rile? llega a sus consultas un nuevo capítulo de «pesadilla en el ambulatorio»: Nos hemos quedado sin vacunas Td (tétanos-difteria).
El lunes de la semana pasada, mi archienemiga Irene, cuyo culjanterismo llega al extremo de comunicar desabastecimientos de vacunas antes que el propio Ministerio, me avisaba por Whatsapp de la situación: en el colegio donde trabaja no habían vacunado a los adolescentes de la vacuna del tétanos-difteria.
A pesar de que ella es muy de montarse sus películas, su mensaje (sin emoticonos, por supuesto) que daba entender que aquello no era una broma. Le contesté sinceramente que no tenía ni idea mientras por mi mente sonaba Afredo Krauss en La Tabernera del Puerto:
- No puede seeeeeer… esa vacuuuuna es bueeeena.
Yo también soy de montarme mis películas mentales. O más bien, mis zarzuelas. Si alguien no sabe de lo que estoy hablando, se lo pongo fácil:
Y mientras Kraus daba vueltas en mi cabeza, Irene insistía en que aquello sí podía ser. No se equivocaba.
Esta es la nota informativa que, con fecha 9 de febrero, el Ministerio de Sanidad tiene colgada en su página web al respecto:
La carta no necesita mucha interpretación. El resumen es que los dos laboratorios que comercializan la vacuna en España se han quedado sin ella. Por ello, y con motivo de «reservar dosis» por si alguien se pincha con un clavo oxidado y va corriendo a urgencias (más o menos), se suspende la dosis Td a los adolescentes que figura en el calendario vacunal. Esta dosis en muchas ocasiones se administra de manera colectiva en los colegios o institutos:
¿Es peligroso que se queden sin vacunar los niños de 14 años?
Que no cunda el pánico porque los niños llevan ya varias dosis de la vacuna tétanos-difteria en su cuerpo y, en el caso de necesitarla «individualmente» (así dice la nota), habrá vacunas disponibles. Eso sí, resulta irónico que la anterior dosis (la de los 6 años), también se haya suprimido por desabastecimiento.
Al parecer habrá un catch-up para estos niños de 6 años, por ejemplo como mi hijo, que se han quedado sin vacunar. Pero tampoco sabermos cuándo.
Reflexión de la boticaria
Entiendo que el proceso de fabricación de vacunas es largo y muy costoso.
Entiendo que pueden surgir «brotes» inesperados de enfermedades que se daban casi por liquidadas y pongan todo patas arriba.
Pero, a pesar de todo, tres desabastecimientos simultáneos son muchos.
Este tipo de situaciones no sólo generan desconcierto sino también desconfianza entre los padres en torno a las vacunas. Y es que, realmente, resulta complicado de entender que en el año 2017, en un país como España, andemos con este baile vacunal. La imaginación es muy libre y las hipótesis vuelan. No podemos permitírnoslo.
Señores, a quien corresponda… a la tercera va la vencida. Espero de corazón que no tengamos que continuar en esta línea. Y recordad: ¡las vacunas salvan vidas!
